Fundación Goya en Aragón

Boceto preparatorio procedente de la colección de la condesa de Villagonzalo; en la actualidad forma parte de la colección Maria Luisa Maldonado de Madrid. Junto con el del Milagro de San Antonio de Padua, son los únicos bocetos de las pinturas de la ermita la Florida que se tienen por obra segura de Goya.

Se trata de un primer apunte que Goya elaboró antes de enfrentarse a la decoración del cuarto de esfera del ábside de la ermita de San Antonio de la Florida.
Mantiene ciertas similitudes con la pintura final como la entonación amarillenta de la luz divina que surge del Triángulo Trinitario, representación simbólica de la divinidad de la que surge un haz de rayos que se expanden.
Los ángeles que rodean el símbolo divino también conservan la armonía de su agrupación, aunque en la obra definitiva se aumentara la escala y se trasladaran a un primer plano, para que el espacio quedara más lleno. Por otro lado, las figuras angelicales se agitaron y arremolinaron más, por lo que el ambiente y el ritmo del boceto se tornaron más enérgicos en la obra definitiva